crisis global

Durao Barroso vs Perdidos

Durao Barroso, destacado miembro del club Bilderberg, al filo de concluir una década como presidente de la Comisión Europea nos cuenta que la UE no creó ningún problema y responsabiliza al Banco de España por “errores de supervisión”. Vamos a comparar lo que dice con la investigación llevada a cabo en Perdidos.

 

“Algo debe reemplazar a los gobiernos y el poder privado me parece la entidad adecuada para hacerlo”. – David Rockefeller en Newsweek International (1/2/1999).

 

La crisis financiera y socioeconómica que hoy sufrimos asaltó nuestras vidas como un ladrón en la noche mientras el mundo dormía plácidamente en el regazo de un espejismo de lujos, viajes y casas concedidas mediante créditos bancarios o ahorros invertidos en bancos de confianza, que prometían enormes lucros sin riesgo alguno.

La presentación en sociedad de la crisis tuvo lugar el 14 de septiembre de 2008 con la caída de Lehman Brothers. Desde ese momento y encabezados por el entonces presidente de EEUU, George W. Bush, la consigna fue clara: “Reconocemos que esta es una seria crisis global que requiere una respuesta global”.

¿Realmente es posible que una catástrofe de tales dimensiones se desencadene de un día para otro? ¿Dónde estaba el dinero?

Y la crisis…¿qué crisis? La crisis era solo para algunos porque se estimaba que los ricos estaban incrementando sus fortunas en torno al veinte por ciento al tiempo que en la clase media recaía el castigo de pagar la estafa generada por los mercados.

¿Y cómo es esa estafa? Veámoslo con un ejemplo:

Imaginad un mercado de abastos o un zoco. Entre todos los comerciantes acuerdan unas leyes destinadas al buen funcionamiento de esta colmena de tiendas. Todo funciona con normalidad hasta que uno de los mercaderes advierte que es más inteligente que los demás y decide utilizar esa inteligencia para ganar más dinero. Pero para ello tiene que saltarse las reglas que previamente había suscrito con el resto. Entonces se alía con otros a los que intuye su misma codicia, o les lava el cerebro a cambio de prometerles grandes beneficios, y empiezan las trampas. Primero asaltan el camión que suministra los tomates a todos los mercaderes, evitando que llegue a los clientes, y crean otro mercado donde venderlos. Aprovechando la necesidad de los ciudadanos de consumir tomates y, ante los supuestos rumores de la escasez de esta fruta, aumentan el precio del mismo, especulando con uno de los llamados bienes de consumo.

 

“En política nada ocurre por casualidad. Cada vez que surge un acontecimiento se puede estar seguro de que fue previsto para llevarlo a cabo de esa manera”. – Franklin D. Roosevelt.

 

Ayer el presidente de la Comisión Europea responsabilizaba al Banco de  España de la crisis por “errores de supervisión”. La UE no creó ningún problema, afirmaba.

 

durao barroso club bilderberg

 

Resulta curioso que no recuerde la frase de presidente del Banco Central Europeo: “Los Estados deben comprender que hace tiempo que perdieron su soberanía”.

¿Cuándo la perdimos? Cuando sin haber informado correctamente a los ciudadanos los parlamentarios europeos, muchos de ellos miembros de Bilderberg, como el presidente de la Comisión europea, Durao Barroso, aprobaron el Tratado de Lisboa, o el Tratado de Maastrich, en donde ya se incluía una drástica cesión soberanista.

Las conclusiones a lo que aquí están leyendo en respuesta a las palabras de Durao Barroso están íntegramente contenidas en mi última obra: ‘Perdidos’. Si quieres estar más informado sobre estos temas te invito a descargar gratis el primer capítulo de “Perdidos, ¿quién maneja los hilos del poder? Los planes secretos del Club Bilderberg”. Y si tu interés se acrecienta también puedes comprar Perdidos.

 

Concluyo haciendo mía la pregunta del parlamentario británico Dennis Skinner:

“¿Cómo es que cuando todos esos magnates de los medios de comunicación, los banqueros y los políticos se reúnen juntos desde 1954 ninguno fue capaz de detectar la llegada de la crisis? ¿O es que tal vez la han causado?

 

Elecciones europeas. El poder en manos del Club Bilderberg

Elecciones europeas. El poder en manos de Bilderberg

Los sucesos de Ucrania y Crimea están revelando a quienes aún no se habían atrevido a abrir los ojos, la verdadera naturaleza del mundo: conquistar, mantener y expandir el poder a costa de lo que sea.

Por estas elevadas causas se forman bloques, como la Unión Europea, y grupos secretos. El más famoso y elitista de todos es el club Bilderberg, al que investigo desde hace una década y considero el grupo secreto más conocido del mundo. Portavoces oficiales y oficiosos de ambas entidades se han empeñado en defender que estas uniones nacieron por una noble aspiración: la paz.

Por ejemplo, el aristócrata y bilderberg Denis Healey, ex ministro de Economía y de Defensa del Reino Unido, realizó unas reveladoras declaraciones al periodista inglés Jonh Ronson donde promocionaba esta idea de paz: “Decir que nos esforzábamos por establecer un único gobierno en el mundo es exagerado, pero no es enteramente incierto. Nosotros, en Bilderberg, sentíamos que no podíamos continuar luchando el uno contra el otro para siempre y matar a la gente y dejar a millones de personas sin hogar. Así que pensamos que una sola comunidad en todo el mundo sería una buena cosa”.

Otra muestra de esta loable aspiración pacifista la encontramos en las declaraciones del presidente de la Comisión Europea, el también bilderberg Durao Barroso, quien, en vísperas de la ceremonia de entrega del Nobel de la Paz a la UE, exclamó: “Este premio es un reconocimiento justo de ese magnífico proyecto de paz que es la Unión Europea”.

Cualquiera que conozca solo un poco su historia sabrá que la Unión Europea nació como un mercado y no como un proyecto de paz, pero quienes mueven los hilos del poder aprovechan cualquier ocasión para hacer propaganda de sus creaciones y, desde el punto de vista del marketing, la paz siempre es más estética que el dinero. Pero no. La paz nunca fue ni será el fin último de una alianza geopolítica; el objetivo de estas coaliciones es el poder.

[Tweet «Sé que es un secreto porque todo el mundo habla de él – Howard Phillips Lovecraft»]

Paz o poder

Tan acostumbrados estamos a sus ambigüedades, silencios y falacias que nos sorprende que un político ose llegar tan lejos como Tony Blair, el candidato vencido a presidir el Consejo Europeo y miembro del imperio bilderberg, quien se ha expresado de una forma pasmosamente clara. Uno de los efectos de esta crisis es el auge del nacionalismo en todos los países europeos, pues son muchos quienes consideran a la UE el gran enemigo de las soberanías. Unos pocos meses antes de la reunión anual de Bilderberg 2013 en Reino Unido, el ex Premier (laborista) se opusó al creciente nacionalismo británico argumentando en un artículo en Mail on Sunday que ahora existe un nuevo motivo para la unión que nada tiene que ver con la paz: “Estoy de acuerdo también con la defensa de David Cameron (conservador) de por qué Gran Bretaña debe permanecer como miembro de pleno derecho de la Unión Europea. En 2013 hay una nueva razón de ser, que es más fuerte, más clara y más duradera: no la paz, sino el poder”.

Ahí lo tienen clara e inesperadamente expresado por boca de alguien que sabe de lo que habla, de alguien que trabaja y pertenece a los núcleos del poder. Siento contradecirle, señor Blair, pero el poder no es una nueva razón de ser sino una motivación tan vieja como el mundo. Siempre, señor Blair, siempre se trató del poder. El mundo se mueve para conquistarlo o para mantenerlo, y los sucesos de Ucrania y Crimea están revelando a la luz pública cómo de cínicos o hipócritas pueden ser los que aseguran que las uniones, los bloques o los clubes elitistas se forman para conquistar la paz. Es bueno que alguna vez un miembro del olimpo del poder hable claro porque pone en evidencia a aquellos paniaguados y sofistas que se empeñan en convencernos de que trabajan y se unen por el bien del planeta en vez de por el suyo propio.

Primera reunión oficial del Club Bilderberg

Primera reunión oficial del Club Bilderberg

Las mentiras del Premier

En 1954 se celebró la primera reunión oficial del Club Bilderberg en Holanda con la intención de suscribir la mayor alianza del mundo occidental entre los propietarios del dinero, los funcionarios y presidentes de gobierno, los servicios secretos y militares, el ámbito académico, el de las multinacionales y las comunicaciones, así como la realeza y la aristocracia europea. Desde entonces han celebrado reuniones en Europa, EEUU, Canadá y Turquía preservando su secreto hasta que en 2007 decidieron mostrarse al mundo siguiendo uno de sus axiomas predilectos: si usted aparenta poder, la gente enseguida se lo concede.

Unos años antes, en 1993, Tony Blair fue reclutado por el Club Bilderberg, que suele fijarse en jóvenes promesas para lanzar sus carreras al estrellato a cambio de que presten sus servicios a los objetivos de la distinguida entidad. El primer encuentro con la elite no fue nada mal, así que un año después se convirtió en el presidente del Partido Laborista y tres años más tarde en Primer Ministro.

A partir de entonces los parlamentarios británicos comenzaron a cuestionar sus vínculos con Bilderberg. En marzo de 1998, le preguntaron cuántos miembros de su Gobierno habían asistido a reuniones del Club y su respuesta fue tajante: “Ninguno”. Como él mismo formaba parte de su Gobierno, negaba su propia asistencia mintiendo con total impunidad en una cámara democrática. Estaba bien aleccionado por Bilderberg para mantener el secreto de las reuniones.

Al año siguiente, le requirieron el nombre de los ministros y funcionarios que asistirían a la reunión del grupo en Sintra (Portugal) y le pedían que realizara declaraciones al respecto. Esta fue su respuesta: “Me han dicho que el Grupo Bilderberg suele invitar a un número de personas del gobierno, la política, la industria, las finanzas y la educación de un gran número de países a su conferencia anual. No hay representación oficial del Gobierno del Reino Unido”. “Me han dicho”, respondió Blair como si él no conociera de primera mano la naturaleza de los invitados. Tampoco le preguntaban si alguno de los ministros y funcionarios que pudiesen asistir lo harían como representantes del Gobierno sino cuáles eran sus nombres. Pero no lograron sacarle una palabra más.

Y de nuevo en el parlamento británico, en 2006, Norman Baker le interrogó acerca de si iba a proporcionar la información solicitada desde 1997 respecto a sus amistades con el distinguido grupo. El Premier volvió a negar con contundencia: “No he asistido a esas reuniones”.

Pero en junio de 2012, el que había mentido en repetidas ocasiones en su propio parlamento recuperó de súbito la memoria ante una pregunta realizada por un periodista de www.wearechange.org

–        Reportero: ¿Qué opina del Club Bilderberg?

–        Blair: Un grupo muy útil. Recuerdo haberme reunido con ellos en 1993. Es un gran logro que gentes de diferentes partes del mundo se reúnan, así que lo veo como algo bueno.

No logro entender la segunda pregunta, pero sí se advierte que Blair se siente un tanto incómodo y apurado y responde con titubeos:

–        Eeeh… sí, bueno… tal vez haya cambiado algo desde que yo fui.

Sus respuestas delataron que había mentido reiteradamente al Parlamento. ¿Cómo podemos fiarnos de políticos, de líderes mundiales que mienten de forma tan impune? ¿Nos dicen la verdad en algún momento?

Desde los años 90, en la Cámara de los Comunes y en la de los Lores se han formulado numerosas preguntas sobre Bilderberg que han quedado sin respuesta o encontraron las evasivas y ambigüedades propias del lenguaje político. En España se han enunciado tres, pese a que los tuvimos reunidos en Sitges en 2010. Los parlamentarios de la UE también han cuestionado incontables veces a la polémica entidad y a sus asistentes, como el ex ministro Pedro Solbes, Romano Prodi, Mario Monti o el presidente del Consejo Europeo Van Rompuy obteniendo idéntico resultado.

documento-senado-bilderberg-sitges-2010

Este domingo se celebran elecciones europeas y dice la propaganda electoral que el poder lo tenemos nosotros. Lo tenemos. Tenemos el poder de reaccionar porque ahora mismo el poder está en otras manos, en las manos de Bilderberg.

Si quieres estar más informado sobre estos temas te invito a descargar gratis el primer capítulo de “Perdidos, ¿quién maneja los hilos del poder? Los planes secretos del Club Bilderberg”. Y si tu interés se acrecienta también puedes comprar Perdidos.

Vergüenza, ¡¡assassini!!

Siete días después de la muerte de 200 personas en la costa de Lampedusa, el primer ministro italiano, Enrico Letta, se ha acercado hasta allí para hacerse una fotografía arrodillado con una corona de flores ante un ataúd. ¿Quién le acompañaba para realizar este cínico gesto? El presidente de la Comisión Europea y destacado bilderberg (de segunda escala), José Manuel Durão Barroso. ¿Cuáles han sido las palabras de Letta? «Este es un problema europeo». ¡Claro, Letta! Aprovecha la ocasión para hacer propaganda de la Unión Europea, de tus amos. Si las naciones están en manos de la UE, que al mismo tiempo está en manos de Bilderberg, ya no es un problema italiano… porque Italia no existe. 
Pero ¿cuáles han sido las palabras de algunos italianos que estaban y/o se desplazaron hasta allí? ¿Los han recibido con flores? ¿Se han quitado el sombrero ante «la autoridad»? ¿Se han arrodillado ante «sus amos»? ¡¡No!! Los han recibido gritando alto y claro, sin perder las formas ni la educación: ¡¡Sinvergüenzas!! ¡¡Asesinos!! ¡¡Assassini!! ¡¡Vergoña!! 
Bravo por los italianos.

Lampedusa