Una niña, un niño, un portátil

One Laptop Per Child

O por qué es necesario que los esclavos no piensen

¿Te consideras una esclava o un ser libre?

 

“Un esclavo no debe hacer otra cosa que obedecer a su amo, hacer lo que se le dice. Aprender echaría a perder al mejor esclavo del mundo. Si enseñas a un esclavo a leer será imposible mantenerlo. Le incapacitará para ser esclavo a perpetuidad”*. Frederick Douglas.

 

El señor Douglas (1818-1895) sabía perfectamente de lo que hablaba porque él nació esclavo en el condado de Talbot, Maryland. Luego se convirtió en un destacado escritor y un orador abolicionista; un gran reformador social. Le llamaban El Sabio de Anacostia y El León de Anacostia. Es uno de los escritores afroamericanos más importantes de su época y de toda la historia de los Estados Unidos. Lo consiguió gracias a Sophia —nombre de enorme simbolismo en esta historia—, la esposa de su segundo amo, quien le enseñó a leer.

*En el texto, he sustituido la palabra negro por la de esclavo con el fin de adecuarlo a nuestra época y para potenciar la idea que deseo transmitir. Ya no hay esclavos en los campos de algodón y tabaco, pero la esclavitud sigue vigente hoy día. El texto original es este: “Un negro no debe hacer otra cosa que obedecer a su amo, hacer lo que se le dice. Aprender echaría a perder al mejor negro del mundo. Si enseñas a un negro a leer será imposible mantenerlo. Le incapacitará para ser esclavo a perpetuidad”.

 

frederick douglas

 

[Tweet «Los esclavos de la llamada era de la información son quienes están apartados del conocimiento»]

 

El lúcido León de Anacostia comprendió cuál era la estrategia de los poderos de su época y, con su trabajo, nos adelantó cuál iba a ser la de los futuros generales del imperio Bilderberg: trabajar sin descanso para sembrar la incultura. En este ámbito, aludo a cultura como conocimiento, saber, sabiduría.

La universalización de la educación que promueve la ONU va directamente dirigida a la imposición de un pensamiento único y para conseguirlo es necesario noquear nuestra capacidad crítica. De nuevo han encendido una gran hoguera, solo perceptible por los ojos de la verdad. En ella arden los libros desde hace décadas.

El mensaje velado de los amos del poder es: [Tweet «no penséis, estamos aquí para pensar por vosotros y para decidir qué es lo que os conviene.»] Ustedes no están capacitados para pensar.[1]

Sobre ello estaba reflexionando un frío amanecer de primavera, antes de que la cafetera expulsara mi café caliente, al sentarme en mi escritorio repleto de documentos. El cielo aún permanecía oscuro cuando encendí el ordenador y me dispuse a leer los titulares del día. Entre el caos humano rutinario, una noticia llamó poderosamente mi atención: Presidente Sánchez Cerén lanza el programa “Una Niña, Un Niño, Una Computadora”. No era la primera vez que me enfrentaba a este tema. Sabía que unos años antes había leído algo similar, pero aún sin despabilar, sin haber tomado mi irremplazable café, yo era incapaz de recordar.

Tres sorbos de mi líquido elemental y varios whatsapp más tarde, el enigma tenía nombre. ¡Eureka! “Cris, eso es lo de los ordenadores a 100 euros, ¿o eran dólares?, para los colegios”. Se grataba del proyecto OLPC, «One Laptop Per Child»; en castellano, “Un portátil por niño” (Una niña, un niño, un portátil).

Según la propaganda, el proyecto OLPC tiene por objetivo llevar la tecnología a lugares donde no está tan extendida para que las nuevas generaciones de las zonas en vías de desarrollo estén mejor preparadas para el futuro. El proyecto, ideado por el gran gerifalte del MIT, Nicholas Negroponte, en cooperación con las Naciones Unidas cuenta con el impulso de varios gigantes del sector tecnológico como Google o Ebay.

Este proyecto no solo se está llevando a cabo en El Salvador sino en otros países como Argentina, cuya puesta en marcha recibió un reconocimiento por parte de la ONU; Venezuela, donde se le conoció como “Proyecto Canaima Educativo”; o el país donde recientemente he presentado Los amos del mundo al acecho, Uruguay, que también fue premiado por la ONU aunque numeroso estudios afirman que la distribución de computadoras portátiles no generó una mejora en los resultados académicos de los estudiantes.

Pero esto no se llevó a cabo solo en países en vías de desarrollo. Por ejemplo, en España tenemos el  proyecto «Dedos»[2] en un pueblo de Salamanca, Macotera. Y en Finlandia, donde llegó a publicarse que su sistema educativo había decidido sustituir el aprendizaje de la escritura a mano por clases de mecanografía en el teclado QWERTY a partir del 2016, algo que posteriormente fue desmentido por Minna Harmanen, responsable del Instituto Nacional de Educación del país.[3]

Bilderberg anhela alcanzar el poder absoluto que comprende lo económico y lo cultural, desea mantener las libertades en un nivel que, según ellos, nos beneficia a todos. Persuadirnos de que tenemos una función concreta dentro de las sociedades pseudo-democráticas que pretenden construir. Más que de una esclavitud se trata de un adiestramiento. [Tweet «Nos instruyen para volvernos dóciles, para que nos rindamos y les dejemos el mundo en sus manos.»] Nos programan para que solo nos dediquemos a trabajar, a consumir y no a pensar y actuar sino a entretenernos. Sin embargo, los seres humanos poseemos la inteligencia suficiente para entender las claves de los acontecimientos siempre que conozcamos todos los datos. Por ello para ellos fue siempre primordial controlar la prensa, convertirse en sus propietarios, controlar las escuelas, los institutos, las universidades. Porque así secuestran el conocimiento.

¿Entiendes ahora la cita de Frederick Douglas al principio de este artículo? Los ciudadanos representamos hoy, frente a los bilderbergs, a los negros a los que no se les quería enseñar a leer para que no fueran conscientes de la realidad de su esclavitud.[4]

Aunque haya estudios que indican que un exceso de tecnología afecta a nuestra salud mental, nuestro trabajo e incluso nuestras relaciones interpersonales; aunque haya estudios[5] que indican que “escribir a mano ayuda a los niños a mejorar sus habilidades motrices, a aprender a expresarse y a generar ideas” o que “redactar a mano tiene ventajas para el cerebro como ayudar a fijar conceptos, aprender un nuevo idioma y mantener la mente activa”, el proyecto OLPC siguió adelante… Pero fracasó.

 

“El poder no concede nada sin previa reivindicación. Nunca lo ha hecho y jamás lo hará. Los límites de los tiranos los fija la capacidad de aguante de aquellos a los que oprime”. Frederick Douglas

 

[1] Perdidos, ¿Quién maneja los hilos del poder? Los planes secretos del Club Bilderberg; página 164
[2] http://www.abc.es/local-castilla-leon/20140319/abci-tabletas-lugar-libros-201403191028.html
[3] http://www.abc.es/sociedad/20141203/abci-finlandia-educacion-escritura-mano-201412030753.html
[4] Esclavos globales, dentro del capítulo 18 de Los amos del mundo al acecho
[5] http://www.elmundo.es/elmundosalud/2010/11/04/neurociencia/1288896706.html
4 comentarios

    Eusebio

    Desde la antigua Grecia los hijos de los esclavos, son esclavos por naturaleza.
    En el imperio de Napoleón, el estudio científico se basaba en el pragmatismo a favor de la guerra, mientras que lo estudios que no tenían relación con ella se consideraban inútiles.
    En la actualidad gobiernan las empresas, así que los estudios científicos se basan en la necesidad de producir para la sociedad de consumo. Esto se muestra claramente en el plan bolonia, donde los alumnos estamos hasta arriba de trabajo en todas las asignaturas. Y donde se establece la necesidad de aprender inglés porque es necesario para las empresas. Pero si yo quisiera estudiar informática únicamente por comprender esta ciencia, porque ya tuviera otro trabajo, ¿por qué tendría que estudiar inglés? (Independientemente de que en mi caso particular sí que quiero aprenderlo)

    Marina Filoc

    Es un doble filo internet, Escohotado habla de ello como la octava maravilla, la puerta al conocimiento, depende de la cabeza que agarre la computadora. Y yo ya no sé de qué depende que uno salga pensante y curioso. Mi compañera de banco y yo tuvimos una educación parecida, nadie le negó ningún conocimiento. Pero ella vive en la neblina, en la realidad que le venden y yo salí más curiosa que un gato. Investigo, leo, reflexiono. No creo que dependa por completo de educar, hay un ingrediente que algunos tienen ahí arriba en la cabeza y otros no. No les interesa saber y se burlan de los que «se complican la vida» tratando de llegar a la verdad. Hay una especie de relación simbiótica entre los esclavos de hoy y el poder. Les damos la libertad, nos dan seguridad… Algo así. Y los de arriba otros ignorantes, se la pasan trabajando y trabajando, no duermen por mantenernos desconcertados y todo para ser los dueños del mundo. Con lo lindo que es dormir… Saludos cuerdos y de la colina http://marinafiloc.blogspot.com.ar/2015/01/capitulo-35-como-quien-no-quiere-la-cosa.html

    Me quiero ir a la luna – rincondeifg

    […] Hoy he podido leer el artículo de Cristina Martín que viene muy a colación: Una niña, un niño, un portátil. […]

    cristina pietraroia

    Cris es cierto nos aturden de tal manera, que no pensamos con claridad,y así «»ellos»»
    tienen todos los hilos del poder , para sojusgarnos sin que nos demos cuenta.

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